¿Cortina de humo?

Cortina de humo... la película

¿Recuerdan la película "Cortina de humo"? Por allá, por 1977, Barry Levinson dirigió una sátira política de esas que saben hacer los gringos sobre ellos mismos con un reparto de primera, encabezado por Dustin Hoffman y Robert De Niro, que contaba la estrategia de los asesores del presidente de los Estados Unidos, para salvar su imagen pues, a once días de las elecciones en las que aspiraba a ser reelegido, fue acusado de abuso sexual a una joven visitante de la casa blanca. Como era inevitable un efecto altamente negativo en los votantes, la solución fue crear una guerra falsa, contra un país de quinta categoría, para despertar la emoción y el interés del público y desviar la mirada hacia el enemigo y alejarla de la niña abusada en la sede de gobierno. 

Esa estrategia la usó Diego Gallo, el exsecretario de infraestructura de Medellín, para decir que la denuncia contra él por presionar a la EDU para comprar lotes innecesarios a precios astronómicos es una cortina de humo lanzada por Aníbal Gaviria para tapar irregularidades mayores que ocurren en la actual administración de Medellín. Y señaló, entre otras cosas, el tema de las basuras.

Tiramos la pregunta y empezaron a saltar cositas:

"Que el informe de la investigación interna es contundente".

"Que la presión de Gallo era tenaz sobre la gerente de la EDU y contra subalternos que fueron los que pusieron la cara en las diligencias".

"Que está sacando en limpio a los que más saben del asunto".

"Que dos hermanos manejan los contratos entre la EDU y la Secretaría de Infraestructura Física de la Alcaldía de Medellín: Uno en la EDU y otro en la Secretaría."

"Que César Mora, quien era Secretario de Medio Ambiente de Gallo en la alcaldía de Envigado, le presentó a Gallo, su jefe, al vendedor del lote de Altavista." O sea, que lo conoce bien. Sobre este personaje, Fernando León Londoño, cuenta El Colombiano:

¿QUIÉN ES FERNANDO LEÓN LONDOÑO?

En el estudio de los títulos de un predio al frente de la iglesia de San Lucas, una de cuyas solicitudes de compra hizo José D. Gallo, aparece como propietario anterior Pablo Escobar y, luego, Fernando León Londoño Velásquez, según funcionarios de la Alcaldía. Este último, insistieron, se dirigió al Municipio el año pasado para que le comprara una finca en Aguas Frías, corregimiento de Altavista. Según información del alcalde, Aníbal Gaviria, esta persona tiene antecedentes judiciales de pertenencia a la mafia. En registros periodísticos de agosto de 1995 figura que "Fernando León Londoño Velásquez fue condenado a 105 meses de prisión por enriquecimiento ilícito y fue recluido en la cárcel de Máxima Seguridad de Itagüí".

"Que el lote de Altavista era usado por los malosos del sector como base para sus travesuras".

"Que la policía ocupaba ese terreno hasta que la alcaldía se los alquiló en 2012".

"Que el 9 de octubre de 2013 fue un día de especial actividad para Margarita María Ángel Bernal, gerente de la EDU..."

"Que la Secretaria de Medio Ambiente, Ana Milena Joya Camacho, recomendó comprar los cuatro predios, argumentando que serían muy buenos para un CAI periférico. ¡Ni que supiera de eso! ¡Ese no es un tema de su despacho! ¿O sí?

Esa si es toda una película. Algunas de las cosas las leímos en el informe (que nos llegó de muy buena fuente). Miren el título: EVALUACIÓN AL PROCESO DE ADQUISICIÓN DE BIENES INMUEBLES SOLICITADOS POR PARTE DE LA SECRETARÍA DE INFRAESTRUCTURA FÍSICA DE LA ALCALDÍA DE MEDELLÍN. 

Léanlo completo... Hay detalles curiosos. Muchas cosas para aclarar. Diálogos, fechas, relaciones, lavadas de manos.

Y Diego Gallo dice que "está a punto" de denunciar a Aníbal Gaviria. Que sus aliados son santas palomas y que es víctima de la actual administración. Y sigue mirando con el retrovisor para tratar de echarle el agua sucia a Alonso Salazar, a quien vimos en estos días por los lados de La Alpujarra.

Estas críticas que hacían a la Película de Levinson, le caben perfectamente a la estrategia de Gallo: "Ácida comedia acerca de la verdad, la justicia y otros efectos especiales". "Entretenida y brillantemente tramposa. Como la historia". Javier Rioyo: Cinemanía 

"Soberbia y ácida crítica a los entresijos del poder, de la mano de un espléndido guión de David Mamet (...) se mueve entre el drama y la comedia con una mala uva de lo más estimulante." Miguel Ángel Palomo: Diario El País.